El Pozo Bar Café, el relevo hacia un público joven
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De padre a hijo, la gestión de El Pozo Bar Café ha cambiado. Uno de los retos de este bar de barrio es atraer a un público más joven. Su copropietario, Javier Núñez, se dedica al asesoramiento financiero pero mantiene en pie el negocio familiar por una cuestión sentimental: que el trabajo de 40 años de su padre no desaparezca.
Un bar familiar, de barrio, de toda la vida. Así es El Pozo Bar Café en palabras de su copropietario Javier Núñez, quien forma parte de la segunda generación al cargo del negocio. Su padre llevó las riendas del bar durante 40 años y, ahora, el relevo le ha tocado a él, aunque de una forma algo distinta. Tal y como explica Javier, su padre se encargaba del bar de la forma tradicional, trabajando en él día y noche, desde la apertura hasta el cierre. Sin embargo, para Javier el bar no es el centro de su vida laboral. La mayor parte de su tiempo trabaja como asesor financiero, pero ha decidido encargarse paralelamente del negocio familiar por un tema, ante todo, sentimental: “no quería tirar por la borda 40 años de trabajo de mi padre”, explica.
Un nuevo modelo de gestión
Junto con otro socio, Javier se encarga de llevar la gestión del bar: relaciones con proveedores, contabilidad, nuevas iniciativas, proceso de renovación de la carta, etc. En el día a día, delega la mayor parte de las responsabilidades en sus tres empleados. Uno de sus objetivos principales es atraer una clientela más joven y con ese propósito ha iniciado, entre otras propuestas, catas de vino online. Su reto, lo tiene muy claro: “Conseguir que la gente olvide a mi padre, no queremos que nos comparen con él, sino con el resto de bares”.